por Anouk Nindarkmel Miér Ene 21, 2009 11:47 pm
Anouk la observó risueña mientras ella hablaba con el muchacho.Se la notaba feliz con aquellas personas a su lado ,aunque seguía teniendo mucho frío. Parecía ser que la chica lo había notado ,por eso le brindó la chaqueta de su chandal como abrigo ,la pequeña rubita dejó escapar una inocente sonrisa de sus tímidos labios.
-Muchas gracias...-agradeció con su tonito infantil mientras empezaba a entrar en calor-.
Escuchó lo siguiente que la chica comentó ,sus flores...sus hermosas y delicadas flores...La joven era muy agradable ,al igual que el muchacho ,nunca nadie se había parado a conversar con ella o a ofrecerle compañía ,realmente aquello era un precioso milagro. Aún con todas las flores agarradas por sus finas y pequeñas manos ,se acercó hacia ellos mientras se las brindaba sonriendo con ternura ,con aquella sonrisita parecía un verdadero ángel.
Cuando la muchacha le acarició su sedosa y blanca mejilla ,posó una de sus manitas en la de la joven ,era un gesto tan fraternal...
Ellos eran justamente la idea que quería tener de unos padres ,dos personas que se amaban ,eran amigos ante todo y que eran amables con los demás. Se sentía protegida junto a ellos ,por una vez en su corta vida.
Recordaba todo lo que había tenido que sufrir desde su nacimiento ,dormir en la calle ,vivir de las sobras de los demás...a veces su llanto de chiquilla no tenía cesar.